Kristy Theissling siempre había pensado en tener unos abdominales de diez, un abdomen totalmente plano y un cuerpo esbelto; sin embargo, como ella misma afirma, en los 10-15 años que estuvo intentándolo nunca lo consiguió. Y llegaron los hijos.

Dos embarazos con sus dos partos que dieron lugar a sus dos hijos que, hoy por hoy, tal y como dice en Quora, le quitan gran parte del tiempo libre del que dispone. Aun así, Theissling ha conseguido lo que siempre había querido, y lo ha hecho sin salir de casa. ¿Cómo lo ha hecho? Con cuatro acciones específicas que nos explica.

1.- Giros rusos

Coge unos libros gordos que tengas en casa o simplemente unas botellas grandes de bebida llenas de líquido. Después siéntate en una silla o mismamente en el váter y comienza a girar tu cintura con estos pesos de un lado hacia otro.

Tienes dos variaciones: lo puedes hacer con los pies en el suelo (esta es la variante sencilla) o también con los pies elevados, donde ya notarás cómo la zona abdominal se tiene que mantener tensa para que tus piernas puedan seguir estando elevadas.

2.- Escala la montaña

Es uno de los ejercicios más duros y a la vez más sencillos de hacer. No necesitarás nada, tan solo el peso de tu cuerpo y, si quieres, una esterilla.

Túmbate en el suelo boca abajo y apoya tu peso sobre tus manos, como si fueras hacer flexiones de toda la vida. Ahora viene lo bueno: tienes que subir tu rodilla derecha hasta la altura de tu hombro izquierdo y viceversa. Mantén el abdomen tenso y las caderas centradas. Haz 10 repeticiones de cada lado y ¡a sufrir!

3.- Escribe el abecedario

Unas mujeres realizan abdominales
Unas mujeres realizan abdominales | Getty Images

Hacer abdominales es un coñazo, pero si lo unes con un poco de originalidad igual te animas más. En este caso, es tan sencillo como tumbarte boca arriba y, con las piernas juntas y elevadas en ángulo recto respecto a tu espalda, ir dibujando el abecedario en el aire sin que tus piernas toquen el suelo.

4.- Squat básico

Si ya has hecho squats en algún momento sabrás de lo que te hablamos: las temidas sentadillas. Es tan fácil como coger un peso que tengas en casa de menos de cinco kilos, juntar las piernas y flexionar hasta que el trasero esté a la altura de las rodillas aproximadamente. En este vídeo puedes ver todos sus beneficios