Por fin ha llegado el día tan deseado. Comienzan las vacaciones pero, lejos de provocarnos una alegría extrema, nos genera una enorme ansiedad porque nos cuesta horrores conciliar el sueño fuera de casa.

Las vacaciones provocan un cambio total en nuestra rutina diaria. Al no trabajar, se trastocan todos nuestros horarios. Nos acostamos más tarde, no madrugamos… Modificamos hasta nuestra alimentación.

Si además nos vamos fuera, ya sea a un hotel, un apartamento o la casa de unos amigos, debemos dormir en una habitación y en una cama diferente a la nuestra, lo que provoca que a muchas personas les trastoca el sueño

No te agobies. Siguiendo unas sencillas pautas conseguirás dormir bien y te levantarás con la energía suficiente para aprovechar al máximo las merecidas vacaciones.

1.- Procura no dormirte durante el viaje. Por muy largo y aburrido que pueda parecerte, es mejor que consigas mantenerte despierto. Ya dormirás por la noche cuando llegues a tu destino.

Si te encuentras realmente cansado, cuando llegues a tu destino túmbate un rato -excepto que sea ya de noche- pero no más de 20 minutos. Si la siesta se te va de las manos, además de haber desaprovechado medio día de tus vacaciones, por la noche te resultará mucho más difícil quedarte dormido.

2.- Cuidado con las cenas. Durante las vacaciones tendemos a comer y a beber más de la cuenta lo que se traduce en digestiones mucho más pesadas. Procura que las cenas sean ligeras, poco especiadas y poco picantes.

No obstante, si no puedes evitar darte un homenaje, al fin y al cabo te lo has merecido, sal a dar un paseo a la luz de la luna y deja pasar al menos un par de horas antes de irte a la cama. Si te gustan las infusiones, prueba alguna digestiva o relajante. Procura, eso sí, evitar la cafeína.

3.- Mantente activo. Las vacaciones son para descansar, para desconectar de las rutinas diarias. Pero también son un buen momento para hacer deporte o salir a pasear para conocer nuestro lugar de destino.

Nada o apúntate a clases de surf. Madruga y aprovecha el día. Cuando te metas en la cama por la noche, caerás rendido. Pero no te pases. El objetivo es volver desestresado de las vacaciones

4.- Olvídate del móvil y la tablet antes de irte a dormir. Aprovecha estos días para desconectar del mundo. Especialmente a la hora de ir a dormir. Lo único que conseguirás será activar tu cerebro, lo que dificultará que caigas en los brazos de Morfeo. Tampoco es buena idea que pongas la radio o la televisión. Desconecta. Tu mente lo agradecerá.

5.- Duerme a oscuras. Baja las persianas y echa las cortinas. Si en tu destino hace mucho calor, puedes optar por poner en modo suave el aire acondicionado. Si prefieres dormir con las ventanas abiertas, mete en la maleta tapones para los oídos y un antifaz para dormir.

6.- Mantén las mismas rutinas. Si te cuesta dormir cuando estás de vacaciones es porque has alterado demasiado tus rutinas, así que procura mantenerlas. Si sueles ducharte antes de irte a dormir, hazlo también en tu lugar de vacaciones.

Si sueles leer antes de apagar la luz en tu día a día, no olvides el último libro que estabas leyendo. Y si eres muy maniático con las almohadas o las sábanas, no te las olvides. De hecho, si vas a ir a un hotel, llama y pregunta por el equipamiento de las habitaciones.