¿La clase de spinning se te hace cada vez más cuesta arriba? ¿Te aburres con tu tabla de ejercicios en casa? Pues ya no pongas excusas porque puede que en la realidad virtual puedas encontrar esa “chispa” de diversión que habías perdido.

Un ejemplo de esta aplicación es el llamado fitness inmersivo que supone recrear los diferentes entornos en los que se podría desarrollar la actividad deportiva que realizamos. Por ejemplo, si estás sobre una bicicleta estática, puedes abandonar las aburridas paredes y espejos del gimnasio para verte recorriendo un sinuoso camino montañoso, cercano al Himalaya, en una noche de luna llena.

Los impulsores de este novedoso sistema de hacer deporte indoor son los gimnasios  Les Mills http://www.lesmills.com/immersive-fitness/, que  mediante una pantalla de realidad virtual de 270 ángulos permiten que la clase se convierta en cualquier escenario imaginable: una galaxia, una montaña, el interior del cuerpo humano… ¿El problema de esta tecnología? Pues que de momento sólo está disponible en alguna países como Estados Unidos, Suecia o Francia, pero no en España.

De todas formas, no te lamentes porque siempre te queda la opción de convertir tu salón en un entorno paradisiaco en el que practicar tus ejercicios. Una ayuda para ello pueden ser las gafas de realidad virtual Oculus Rrift que junto a la aplicación Runtastic (comprada recientemente por Adidas) nos puede ayudar a practicar nuestros ejercicios junto a simpáticos avatares en 3D.

Se puede hacer aún más complicado el asunto añadiendo a esas gafas otros gadgets como Realm System que funciona ajustándolo a la cintura y a nuestras manos y que mediante una cámara de Kinect sigue nuestros movimientos, mientras por otro lado las Oculus Rift nos ofrecen un entorno de realidad virtual.

Aquí puedes verlo:

Si no te apetece tener que esperar hasta principios de 2016 que es cuando se ha anunciado que se lanzarán las famosas gafas, entonces siempre te queda recurrir a videoconsolas como la Wii con su tabla Wii Fit o el sensor Kinect de Xbox que te pueden ayudar a pasar un buen rato y a mantenerte en forma.

Pero por supuesto, si ninguna de todas estas formas te convence… ¡Venga! ¿Por qué no pruebas a usar la imaginación?