A ver si te suena de algo esta rutina: te levantas, te montas en el coche, una hora delante del volante, te sientas frente al ordenador, en el mejor de los casos ocho horas sentado a las que tienes que sumar alrededor de otras dos (una más para volver a casa y otra de comer). ¿Total?

La friolera de once horas en las que lo único que has hecho es estar sentado. Un par de horas arriba o abajo, esta puede ser la rutina de muchos españoles.

Varios estudios señalan que pasar demasiado tiempo sentados está relacionado con enfermedades cardiacas, diabetes y algunos tipos de cáncer.

Si además queremos empeorar las cosas (sí, todavía podría ser peor) a esa ecuación se le podrían añadir el hambre que te entra cuando pasas demasiadas horas de inactividad física y las múltiples tentaciones que se pueden encontrar en las máquinas de 'vending' como patatas, chocolatinas, etc.

Los riesgos de este estilo de vida se han convertido en un verdadero problema en España con alrededor de un 40% de la población adulta con sobrepeso. Ante esta situación, que se da en la mayoría de los países desarrollados del mundo, el Time hace un repaso por una serie de alimentos saludables recomendables cuando se pasa demasiado tiempo sentados: frutas del bosque, piña, almendras, etc... Sin embargo, no te creas que estos alimentos hacen milagros, recuerda que siempre, siempre, lo mejor será que te muevas.

1. Frutas del bosque: este tipo de fruta te puede ayudar a cuidar la línea ya que, según un estudio publicado en el Journal of Nutrition, aportan pocas calorías y contienen poderosos flavonoides que “desactivan” los genes inflamatorios.

Los arándanos además de contar con un alto índice de flavonoides son ricos en vitamina C y resveratrol, que han demostrado eliminar los radicales libres inflamatorios.

2. Frutos secos: son una gran fuente de Omega-3, un antiinflamatorio potente que ejerce diferentes acciones protectoras, especialmente la anticoagulación de la sangre, que protege de la trombosis y también frena el desarrollo de la ateroesclerosis, que es una enfermedad degenerativa e inflamatoria.

3. Piña: contiene un potente antiinflamatorio llamado bromelina. El problema es que la mayor parte de este complejo de enzimas se encuentra en el tallo de la piña que puede que te resulte algo más difícil de ingerir.

4. Aceite de oliva: cuenta con una molécula que se denomina oleocantal, que también posee propiedades antiinflamatorias. De hecho, según un estudio publicado recientemente por Nature, esas propiedades se han llegado a comparar con las del ibuprofeno.

5. Cúcurma: puede que no la conozcas, pero se trata de una especia a la que se le atribuyen múltiples cualidades, entre ellas beneficios para el hígado, evita los gases y también, gracias a sus propiedades antiinflamatorias, puede mejorar la vida de aquellos que sufren artritis reumatoide o síndrome del túnel carpiano (si pasas horas frente al ordenador, con el ratón en la mano, seguro que te suena este concepto).

6. Ajo: es otro de los alimentos que puede evitar las inflamaciones, según un estudio publicado en Medicinal Chemistry. Además, recientes estudios aseguran que ayuda al metabolismo y a reducir los niveles de azúcar y de grasa en sangre.

7. Té Verde: según un informe publicado en Journal of Advanced Pharmaceutical Technology & Research, el té verde es el tipo de infusión que posee un poder antiinflamatorio más alto.

8. Aguacate: repleto de ácidos grasos oleicos, esta fruta ayuda a evitar y reducir la inflamación en las células musculares, suprime la resistencia a la insulina e incluso permite reducir la grasa del vientre.

9. Pescados grasos: gran parte de los alimentos que consumimos están hechos con grasas trans peligrosas o aceites vegetales (soja, maíz, girasol, cártamo, aceite de palma…) que tienen una alta concentración de omega-6 (inflamatorios) y son bajos en omega-3 (antiinflamatorios).

De hecho, para que nos hagamos una idea, un estadounidense promedio tiene una relación de omega-6 / omega-3 de alrededor de 20 a 1 cuando debería ser de 1 a 1. Para aumentar la proporción de grasas buenas es necesario aumentar el consumo de omega-3 en la dieta semanal, con la ingestión de pescados grasos, como el salmón salvaje.

10. Semillas de linaza: la linaza es otra fuente potente de lucha contra la grasa gracias a su contenido en omega-3, que ayudará a tu cuerpo a metabolizar la grasa.