Tras los kilos de turrón y el roscón como traca final, toca sacudirse los michelines acumulados durante las fiestas. Es el momento de las dietas mágicas, las comidas detox que prometen obrar el milagro en tiempo exprés.

"Tras los días de excesos navideños, contamos con un incremento en el peso corporal por acúmulo de grasa principalmente, y en algunas ocasiones retención de líquidos puntuales por las digestiones pesadas y recarga de alimentos”, explica el Dr. Caballero Díaz, cirujano general y del aparato digestivo y director del Instituto de Obesidad.

“Normalmente las dietas detox consiguen una bajada rápida de peso por eliminación de líquidos pero no de grasa corporal, por tanto logran una pérdida no real de peso”, afirma el doctor, que entiende que estas dietas hipocalóricas, normalmente a base de frutas y caldos, ni funcionan ni son sanas.

No, los milagros no existen y el sobrepeso acumulado necesita tiempo y fuerza de voluntad para ser eliminado. Ni tres días a piña ni 48 horas a base de sopa conseguirán que nos reconciliemos con la báscula.

La solución no pasa por eliminar durante unos pocos días los hidratos, proteínas y grasas de nuestra alimentación, por más que nos digan que así limpiamos nuestro organismo.

El especialista insiste en que "las dietas que prometen gran pérdida de kilos en tiempos muy reducidos, son fracasos absolutos y no se puede considerar saludable una alimentación basada únicamente en caldos y en un tipo de fruta concreta".

Por eso su propuesta es la de una pérdida de peso paulatina, controlada por un médico, que permita por un lado al organismo ir adaptándose poco a poco al nuevo peso, que no promueva carencias vitamínicas y de minerales, y que nos permita evitar el temido efecto rebote.

Aunque no existe tiempo estimado para hacer una dieta, ya que este dependerá de los kilos que necesitemos bajar, de nuestro metabolismo y del estilo de vida que llevemos, nunca será en pocos días.

Y no, tampoco vale con eliminar hidratos, ya que el doctor recuerda que la restricción total de un tipo de nutriente puede generar en el organismo deficiencias o carencias.

Lo más razonable "es distinguir entre hidratos de carbono complejos y simples, conocer las diferencias entre ellos, saber de cuáles no debemos abusar y en qué momento del día es mejor incorporarlos, para conseguir una alimentación sana", recomienda el especialista.

Olvidar durante una larga temporada los mazapanes y volver a calzarse las zapatillas de deporte, nuestras mejores aliadas, va a ser esencial para volver a nuestra figura de siempre.