En una jornada maratoniana y con más de dos horas de retraso sobre el horario previsto, Catar ha resultado finalmente la vencedora de la votación para la organización del Mundial de Atletismo de 2019, por delante de Eugene (Oregón, EEUU) y Barcelona.

La candidatura española contaba, según sus propios representantes entre los que se encontraba José María Odriozola, presidente de la Real Federación Española de Atletismo (RFEA), con las mejores instalaciones y aspectos técnicos, al tener amplia experiencia en la organización de grandes eventos, como el Mundial Indoor de 2005 o el Europeo de atletismo de 2010.

En la exposición de la candidatura a los miembros del jurado de la IAAF intervinieron Josep Miquel Piqué, de la Oficina de Creixement Econòmic del Ajuntament de Barcelona, el secretario de estado para el Deporte, Miguel Cardenal y el alcalde de Barcelona, Xavier Trías, que habló en español, catalán, francés e inglés.

Sin embargo, el auge que está teniendo toda la zona del Golfo Pérsico (Mundial de Fútbol 2022 en Catar) parece que ha pesado más que los argumentos de infraestructuras, organización y logística esgrimidos por la candidatura española.

El speech de la candidatura catarí se centró en mostrar la maqueta de lo que será el puntero estadio donde se desarrollarán las pruebas e hizo hincapié en la facilidad de transporte para llegar al país a través de Catar Airways. Durante el discurso también habló el CEO de la televisión deportiva Bein Sports, que explicó la cobertura que harán durante el evento.

El problema principal con el que se encontró la candidatura de Doha fue las altas temperaturas de verano, pero la solución, a base de trasladar las principales pruebas a la noche e iluminar las calles con más de 400 postes de luz, parece que han sido argumentos suficientes para el jurado.

De este modo, Doha se convertirá en la capital mundial del atletismo en 2019, y relevará a Londres’17 en la organización de un evento de estas características.