Si una de las principales motivaciones cuando sales a correr es la de correr con compañía, imagínate si, además, lo puedes hacer en un espacio cerrado.

Aunque, claro, con las dimensiones que estamos hablando, ese espacio cerrado tendría que ser, como poco, una nave industrial. Y es que la mayor máquina de correr jamás construida mide 5 metros de alto, 3 metros de ancho y 6 metros de largo.

Con estas dimensiones parece lógico que quepa más de una persona. Más en concreto, entran hasta 10 personas corriendo a la vez, a una velocidad máxima de 16 kilómetros por hora.

¿Quién ha construido semejante monstruosidad y para qué?

Parece que esta súpermaquina no se pondrá de moda en los gimnasios, ya que se creó con un único fin: servir como elemento irruptor de una campaña de marketing orquestada por una marca de venta de máquinas para gimnasios.

Durante un día, celebraron en un céntrico parque de La Reina (Chile) cuatro carreras de 10 personas cada una en dos días. A medida que se iba aumentando la velocidad de la máquina, los corredores fueron cayendo uno a uno. El ganador de cada carrera se llevó una máquina a tamaño real (por suerte para él/ella).

Así que, ya sabes, si alguna vez te preguntan que si existe una máquina de correr más grande que la que está en tu gimnasio de referencia puedes contestarles, con rotundidad, que sí.