La depresión es una de las principales causas de baja en todo el mundo, y afecta a una de cada 20 personas. Los tratamientos actuales incluyen psicoterapia y medicación con antidepresivos, pero no acaban por evitar los episodios recurrentes.

Así como el tratamiento con luz brillante se emplea en personas cuya depresión ocurre en periodos donde los meses son más oscuros, los científicos barajan la posibilidad de que también puede solucionar problemas con depresión en el resto de los meses.

En un estudio emplearon 122 adultos con depresiones no relacionadas con el SAD y los reunieron en 4 grupos. Un grupo estuvo 30 minutos sometido al tratamiento con luz brillante al que se le añadió una pastilla como placebo.

Otro grupo utilizó otra estrategia que no incluía la terapia con luz y tomó Prozac. Un tercer grupo tomó una pastilla placebo y siguió una estrategia placebo, y el cuarto y último grupo tomó Prozac y siguió un tratamiento con luz.

Los investigadores hicieron un seguimiento de 8 semanas comprobando a cuántos sujetos les remitía la depresión (definiéndola en una “escala de depresión” usada a escala mundial).

Aproximadamente el 60% de los pacientes que fueron tratados con luz y Prozac fueron liberados del abrazo de la depresión en comparación con el 40% que fue tratado únicamente con luz.

El antidepresivo por sí sólo no fue superior a la medicación placebo. Sólo el 30% medicados con placebo y el falso tratamiento con luz tuvieron la remisión de la depresión. Tan sólo el 20% de los tratados sólo con Prozac obtuvo los mismo resultados.

El director del estudio, Lam, argumenta que los pacientes tratados sólo con luz obtuvo mejores resultados que el placebo, pero también es cierto que tampoco se puede considerar una gran diferencia.

Los científicos no pueden concluir a ciencia cierta se la terapia con luz funciona de verdad, pero para aquellos que la depresión les acoge en periodos estacionales específicos, entonces la luz sí que puede ayudar a corregir esos desórdenes en los ritmos circadianos de nuestro cuerpo, o simplemente nuestro reloj interno.

Lo mismo puede ocurrir con la depresión no estacional. Y es que otra teoría puede concluir que la luz afecta a los neurotransmisores del cerebro como la serotonina (que afecta al estado de ánimo).

Una limitación del estudio es que la exposición a la que fueron expuestos los sujetos no fue medida, explica Simon Rego, director del Centro Médico de Montefiore.

Pero aún así, los autores descubrieron que el tratamiento con luz, ya fuera combinado o no con medicación, fue muy eficaz en pacientes con aquellos con trastornos no estacionales. Y lo mejor de todo, el tratamiento es altamente tolerable por cualquier sujeto.

Parece ser que la terapia con luz, que ya se ha demostrado que es un tratamiento eficaz para los desórdenes estacionales, también puede serlo para aquellos no estacionales.

¿En qué consiste este tratamiento?

Por mucho que sea un tratamiento que “cura” la depresión, y que afecta a nuestro cerebro, este tratamiento está al alcance de cualquiera y se hace en tu propia casa.

Debes comprarte una caja de luz como las que utilizan los fotógrafos (no te asustes que las hay de varios precios). ¡En USA y Canadá hay seguros médicos que incluso las incluyen! Lam explica que puede hacerse mientras desayunas o lees el periódico.