En mi caso siempre me ha gustado más correr con calor. El invierno con su frío, sus lluvias (cada vez menos), su viento y su anochecer temprano me trae por el camino de la amargura. Pero este año el verano me ha dado un par de "zas en toda la boca" y me estoy replanteando el cariño que le tengo al “caloret” a la hora de correr.

¿Pero qué ventajas y desventajas tiene correr con frío o con calor? Estas son las que yo les veo.

Ventajas de correr con calor:

- Puedes conseguir un bonito color tostado en tu piel. Siempre utilizando protección y con el inconveniente de que el moreno que suele quedarse es estilo "albañil" (ya sabes, esas marcas tan sensuales).

- Necesitas menos equipamiento para correr. Las zapas, camiseta, pantalón y calcetines y a correr. En principio no hace falta más. Luego puedes utilizar los complementos que creas convenientes, gafas de sol, gorra... Etc.

- Disfrutar de las vistas. No me refiero a los paisajes por los que corremos, al ir más ligeros de ropa podemos deleitarnos con las vistas de otros corredores y corredoras. Si bien es cierto que corremos el peligro de toparnos con algunas visiones dantescas que nos creen algún que otro trauma.

Desventajas de correr con calor:

- Los madrugones. Si no queremos perecer mientras corremos y morir achicharrados hay que aprovechar las primeras horas del día. El resto del día mejor permanecer a cubierto.

- Excesiva a la par que desagradable sudoración. Pese a los madrugones es difícil no acabar más sudado que Camacho en el Mundial de Corea. Algunos parecemos doradas a la sal al acabar de correr.

- Aumento considerable del consumo de líquidos. La ingesta de líquidos después de correr se dispara. Eso puede hacer que nuestro presupuesto en cervezas se nos vaya por las nubes. Ya sabes, ahorra para cuando llegue el verano.

Ventajas de correr con frío:

- No hace falta madrugar. No es necesario, salir a mediodía o primera hora de la tarde puede ser una delicia. Además podemos mantener el tono moreno del verano.

- Mayor y mejor rendimiento. Después de haber estado corriendo con el calor que nos hace ir subidos de pulsaciones y sufriendo como perros, el descenso de las temperaturas hace que nuestras sensaciones y ritmos mejoren.

- La ducha de después de correr: Reconocedlo. Llegar a casa sin sentir muchas partes de tu cuerpo (no solo manos y pies), despojarse de la ropa, abrir el grifo de agua caliente, ver como se forma el vaho en tu cuarto de baño, meter un pie, luego el otro y dejar que el agua recorra tu cuerpo. Pocos placeres hay que se puedan comparar al de una buena ducha después de correr.

Desventajas de correr con frío:

- Correr como una cebolla. Eso es, con capas y capas de ropa. Camiseta térmica, camiseta de manga larga, corta vientos o chaqueta polar, guantes, braga, orejeras, mallas largas, gayumbos/bragas de felpa… etc. A veces parece que vamos a asaltar un banco en vez de correr.

- Posible pérdida de miembros vitales. Con las bajas temperaturas ponemos en riesgo la integridad de nuestras manos, pies… y los hombres de otro apéndice al que le tenemos mucha estima. No es raro llegar a casa tras una carrera sin sentir estas partes de nuestra anatomía.

- Falta de luz natural. Los días son más cortos que en verano. Por nuestros horarios muchas veces tenemos que correr a primera o última hora del día, eso hace que la luz del sol escasee. El frontal se convierte en otro compañero de fatigas para poder correr con cierta seguridad y la verdad, no es muy cómodo que digamos.

¿Y tú qué prefieres? ¿Correr con frío o con calor?