Estamos en abril, y eso quiere decir que, inexorablemente, se acerca de manera peligrosa el verano y la hora de lucir palmito en la playa o en la piscina. Sin embargo, a pesar de que te apuntaste al gimnasio en enero con la mejor de tus intenciones, aún no has visto los resultados que te esperabas. ¿Cómo puedes quemar más calorías en el rato que estás ahí dentro?
1.- Deja el móvil en la taquilla: empezamos por un básico, un “must” que dirían los gurús de la moda. Desconecta durante un rato de las notificaciones de Facebook, Twitter, Instagram, Snapchat y el resto de redes sociales en las que estés. Todo puede esperar y, por supuesto, la foto dándole duro a las máquinas puedes hacértela falseándola cuando hayas acabado tu sesión de verdad.
2.- En la máquina de correr: estar en la cinta de correr al mismo ritmo durante 45 minutos está muy bien pero, no nos engañemos, es aburrido. Por eso, si quieres aprovechar mejor el tiempo en esta máquina haz lo siguiente:
a) Corre a intervalos: cambia de ritmo cada 5 minutos, de manera progresiva hasta llegar a tu máximo y de manera regresiva hasta llegar a la parada total.
b) Juega con la inclinación: es una de las ventajas de este tipo de máquinas, que puedes estar corriendo en llano o en la montaña. Juega con el porcentaje de inclinación porque, cuanto más te cueste, más calorías estarás quemando. Eso sí, cuidado con los gemelos, porque se te pueden cargar con más rapidez.
c) Trabaja los brazos: si quieres simular que estás corriendo como si lo estuvieras haciendo en la calle, mueve los brazos para balancearte. No te quedes amarrado en la máquina, que es muy cómodo, pero poco efectivo.
3.- En la elíptica: del mismo modo que en la cinta de correr, en la elíptica se puede aprovechar mejor el tiempo si:
a) Usa la resistencia: ¿sabías que existe, verdad? En un momento puede parecer que estás andando rápido y, de repente, estar subiendo por una empinada colina. Con la resistencia tu cuerpo se pondrá más a tono, pero no abuses de ella o acabarás lesionándote.
b) Uso de brazos: no los uses únicamente para dejarlos llevar con la inercia del movimiento de tus piernas. Puedes trabajarlos tirando y empujando de manera activa para hacer un movimiento coordinado.
c) Usa intervalos: al igual que en la cinta de correr, puedes alternar periodos con más resistencia y con más velocidad, a otros más tranquilo. Siempre de manera progresiva, recuerda.
4.- En la sala multifuncional: sí, es esa sale donde hay multitud de herramientas con las que poder trabajar y que, sin embargo, no trabajas por no saber cómo funcionan. Aquí tienes unos ejercicios con Bosu, otros con Kettlebell y otros con la pelota de Pilates. Seguro que después de echarles un vistazo tu mente se abre dentro del gimnasio y comienzas a aprovechar tu hora fitness de una mejor manera.