Alcanzar esa armonía es esencial. En un gimnasio se desarrollan habilidades corporales, un coach o psicólogo fortalece la parte mental, siendo el mindfulness una de las técnicas que mejor funcionan.

"Hasta el momento lo que se había hecho era controlar y cambiar los pensamientos, pero el mindfulness lo que hace es ayudar a percibir esos factores y aceptarlos, lo que en deportistas se traduce en una  mejora del rendimiento”, asegura la psicóloga Lourdes Díaz-Merino, directora de CEICCO Psicólogos.

Esta filosofía se basa principalmente en la habilidad de estar en el momento presente sin juzgarnos, consiguiendo mediante una serie de técnicas la atención plena.

Pero, ¿en qué consiste exactamente?, pues la diferencia con respecto a cualquier otra técnica está en la aceptación de pensamientos o sensaciones, sean las que sean, en no rechazar ninguna reacción emocional y admitirla pues “a veces el resistirnos nos supone tal esfuerzo que nos impide una correcta ejecución del ejercicio”, insiste Díaz-Merino.

Los nervios o la frustración, por ejemplo, deben ser reconocidos con naturalidad, sin que supongan una influencia directa en nuestra forma de actuar o competir.

Solo con esa concentración podremos poner toda nuestra atención en los pies en plena carrera, en las manos y mirada si jugamos al golf…sin que ningún factor externo interfiera.

"Existen dos programas específicos para deportistas, uno de ellos dura seis semanas y está perfectamente estructurado con lo cual es recomendable que sea un especialista de la psicología quien guíe al deportista. Durante este tiempo aprenderá a tener las herramientas suficientes con las que trabajar, siendo necesario un ‘entrenamiento’ diario”, asegura la psicóloga

El programa Meditación Fluir, de Clemente Franco, que trabajó con futbolistas, está dirigido específicamente a deportistas y ayuda a localizar los objetivos, a gestionar el estrés y la ansiedad pre-competicional, a controlar el dolor…

El aumento de la capacidad atencional del deportista lo situará en un lugar privilegiado a la hora de enfrentarse a sus propios retos, además de ayudarle a prevenir lesiones deportivas. Pero para llegar a ese punto hay que trabajar la atención.

El mindfulness es una técnica que, si bien tiene sus orígenes en la meditación oriental, poco o nada tiene de esotérico o místico, siendo una de las técnicas que la psicología actual utiliza para trabajar estados de ánimo y centrarnos en el presente. La forma de llevarla a cabo, aunque está basada en la meditación, tiene  estructura propia.

“El primer anclaje del mindfulness es la respiración, que es esencial la práctica y aprender a respirar bien; después es el body-scan, la revisión de todo el cuerpo, que en un deportista se traduciría en escuchar su cuerpo y concentrar su energía en aquello que va a necesitar poner en marcha, también hay una parte de ejercicios de yoga y de meditación caminando”, detalla la directora de CECCO Psicólogos, quien aclara que se trata de un programa al alcance de todos.

El objetivo es incorporar las emociones a nuestra realidad, un buen recurso para todos en general y los deportistas en particular.