Los canes son un ejemplo de constancia en la actividad física diaria. No hay día que no jueguen, corran, salten o se muevan. Tener mascota hace que llevemos un estilo de vida más activo y que, por tanto, perdamos peso. Te contamos cómo tu perro, por increíble que te parezca, puede ayudarte a adelgazar.

Con su constancia en la actividad física diaria

Que lo de tu perro es un no parar no hace falta que te lo digamos, ya te has dado cuenta tú mismo. Cuando vas a echarte una pequeña siesta le escuchas derrapar por el pasillo de casa mientras se pega una de sus habituales carreras. Cuando por la noche te dispones a entregarte de lleno al sofá para ver tu serie favorita, aparece él con su muñeco fetiche en la boca diciéndote que es hora de jugar. ¡Es como si el cardio te siguiese a todas partes!

Pero aún hay más... Los fines de semana tu perro tampoco te da tregua. Tu idea de quedarte en la cama hasta bien tarde se esfuma cuando, a las ocho de la mañana de un sábado o un domingo, notas cómo unos dientes tiran de uno de tus calcetines. ¡Oh no, es él pidiendo que te levantes ya!

Sacarle a pasear hace que quemes calorías

Llueva, truene o caigan chuzos de punta... tener perro conlleva la obligación de sacarle a pasear todos los días al menos dos veces. Él hace sus necesidades, ve a otros perros, juega y gasa energía. Eso hace que tú también te mantengas activo. Sin que te des cuenta, tu mascota evita que lleves una vida sedentaria.

Los paseos que das con tu mascota no son comparables a la actividad física que puedas hacer en un gimnasio, pero oye, algo es algo: todo lo que sea andar y moverse va a ayudarte a quemar calorías. A partir de ahora serás tú quien pida a tu amigo perruno salir a dar una vuelta.

Su celo es tu HIIT

Correr 20 minutos a toda velocidad, descansar 40 y repetir. Así es el HIIT, entrenamiento de intervalos de alta intensidad o high intensity interval training que haces durante unos minutos para quemar grasa después de darle a las pesas. Aunque tu sitio favorito para hacerlo es en la cinta del gimnasio, tu perro se empeña en que lo practiques en plena calle.

Seguro que te suena eso de sacar a pasear a tu mascota en pleno celo y que esta salga corriendo detrás de cualquier perro que se le cruza. ¡Menudas carreras que te pegas detrás de ella! Eso sí que es entrenamiento de alta intensidad... y tú sin desayunar.

Descubrirás el mundo del canicross

Salir a correr solo te aburre, a tu compañero de piso prefieres dejarle en casa porque, ufff, ya bastante le aguantas y a tus amigos eso del running no les va. ¿Por qué no salir a echarte unas carreras con tu mascota?

Iniciarte en el mundo del canicross es una muy buena opción para hacer deporte junto a tu perro. Ten en cuenta que el animal debe tener más de 1 año de edad y encontrarse en buenas condiciones físicas. Salir a hacer deporte con él resultará mucho más divertido y te permitirá conocer a otros aficionados en las competiciones que se organizan.

La importancia del descanso

Nadie como tu perro te puede enseñar mejor la importancia del descanso. Ellos duermen mucho y eso también les convierte en un referente en la pérdida de peso. No olvidemos que dormir adelgaza y, aunque no hace falta que lo hagamos tanto como ellos, ocho horitas de sueño son imprescindibles para mantener a la grelina (que hace que engordemos) a raya. Además, durante el sueño se libera la hormona del crecimiento y eso hace que nuestros músculos aumenten su volumen si hemos entrenado correctamente.