Elegir actividades colectivas en el gimnasio es cada día más complicado. Cada vez más disciplinas responden a los objetivos de los usuarios: adelgazar y definir en poco tiempo y, a poder ser, de forma divertida.

De los últimos en llegar, pero ya implantado en 85 países del mundo tenemos el Piloxing, una disciplina que mezcla boxeo, Pilates y danza en una hora de actividad frenética tanto cardio como muscular.

Su creadora, la explosiva Viveca Jensen, ex bailarina y experta en fitness creó esta rutina deportiva cuando una lesión la apartó de la danza profesional.

Para mantenerse en forma combinó sus tres grandes pasiones: boxeo, Pilates y baile, y su ocurrencia ha calado rápido, sobre todo entre las celebrities americanas.

Soltando adrenalina

Uno de los secretos del éxito de Piloxing es que sus clases son muy cañeras. En alrededor de una hora se realizan tres bloques de boxeo, Pilates y danza que combinan distintas intensidades de movimiento.

La primera parte cuenta con cuatro bloques de coreografía que utilizan movimientos del boxeo. Saltos cortos, patadas y puñetazos para soltar adrenalina, quemar calorías y realizar un ejercicio intenso con el core y las piernas como principales objetivos. Se trata de un bloque aeróbico que nos permitirá romper a sudar y liberar tensiones y preocupaciones.

Las piernas son las protagonistas de este bloque que se tonificarán rápidamente consiguiendo músculos más largos y definidos.

Clase de Piloxing

Tableta de chocolate

La segunda parte de una clase de Piloxing está inspirada en los movimientos del Pilates y consta de cuatro bloques en los que se trabajan intensamente los abdominales y la espalda. La intensidad de los movimientos se puede ir incrementando con el tiempo, y con experiencia es fácil realizarlos en casa, con una colchoneta fina, ropa cómoda y ligera y unos guantes de 250 gramos que intensifiquen el trabajo de los brazos. Es una actividad apta para practicar descalzos, pues incrementa la fuerza de los pies.

En este bloque el fortalecimiento de los abdominales y el suelo pélvico es la clave de los movimientos, que mejoran el equilibrio, la propiocepción y el control mental del cuerpo.

Termina bailando

Para terminar la clase, el último bloque combina músicas divertidas y coreografías sencillas que acercan la danza al deporte y sirven, tanto para volver a subir pulsaciones, como para estirar el cuerpo y disminuir el ritmo cardiaco para finalizar la sesión. La danza nos hace tener mayor conciencia de nuestro cuerpo, nos permite movernos en el espacio y mejora la autoestima.

Disciplina perfecta para recuperar la forma física después de parones, embarazos o lesiones, la pérdida de peso es posible y la tonificación muscular una realidad si se realiza correctamente y con frecuencia.

Sólo está contraindicado para personas que tengan lesiones en la espalda o en los huesos y para aquellos con enfermedades cardiovasculares diagnosticadas que no puedan realizar actividades de alta intensidad.