Seguro que nunca te has planteado cómo pueden modelar tu cuerpo ritmos vintage como el Rock and Roll, el Jive o el Lindy Hop. Lo retro vuelve a estar de moda y esos bailes tan habituales en otra época han vuelto para quedarse.
Presume de piernas y glúteos
El Rock and Roll es una disciplina muy divertida y, sobre todo, ideal para tonificar piernas y glúteos. El secreto está en la técnica empleada y en los continuos saltos que se ejecutan. Eso hace que la musculatura trabaje continuamente ayudándonos a quemar calorías y poner glúteos, cuádriceps y gemelos a tono.
La clave del rock es que no se para nunca… los pies están en continuo movimiento y cuando se dominan los pasos básicos la velocidad que se adquiere hace que prácticamente nunca estén apoyados los dos pies a la vez en el suelo. Los movimientos más sencillos se complican a base de meterle velocidad e intensidad al salto. Eso lo convierte en un ejercicio idóneo para trabajar el tren inferior, siendo una disciplina perfecta para aquellos que quieran tonificar piernas y glúteos de una forma mucho más amena.
Quema 400 calorias por hora
Además de tonificar, el rock es un baile sumamente aeróbico que nos hará ponernos en forma rápidamente, trabajar la resistencia, mejorar el sistema respiratorio y el ritmo cardíaco. La música es rápida y eso produce una subida de pulsaciones ideal para quemar calorías (unas 400 a la hora), a la vez que trabajamos nuestros músculos.
Todos los pasos son saltados, y la mayoría de los giros y las combinaciones de movimientos están acompañadas de patadas al aire con distinta intensidad y altura. Entre tanto rebote, salto y patada, el trabajo de piernas y glúteos está garantizado.
Luce tripita
Para los que le cojan el gusto y quieran ir más allá, con tiempo y horas se pueden incorporar una serie de acrobacias que nos ayudarán a poner en forma el core, haciendo un potente trabajo abdominal y de brazos.
¡Sólo es cuestión de echarle ganas y horas!