Por esa razón, si ves que tu cabellera empieza a clarear no pienses que la solución es llevar gorra o un peluquín. Tal vez tu objetivo sea centrarte en tu alimentación. Y es que como cualquier parte de nuestro cuerpo, el cabello también necesita nutrientes para mantenerse fuerte y sano.
El problema radica en que los nutrientes que ingerimos son absorbidos por los tejidos esenciales (músculos, órganos, etc.) dejando para el último lugar a los tejidos secundarios como puede ser el cuero cabelludo.
De ahí la importancia de consumir la cantidad suficiente de nutrientes y en las proporciones adecuadas para que llegue a todos los rincones. Si no sabes por dónde empezar sigue estos consejos.
Omega 3
Volvemos a hablar de estos ácidos grasos milagrosos, que además de ser buenos para tu cerebro, también lo son para el sistema circulatorio. Ese nutriente esencial llega hasta el cuero cabelludo y nutre los folículos capilares haciendo que tu pelo crezca más sano. Además promueve la elasticidad del pelo evitando que se rompa con facilidad.
Puedes encontrarlo en: semillas de lino, nueces, salmón y atún.
Zinc
Además de potenciar el crecimiento y reparación de los tejidos, el zinc hace que tu cabello se mantenga saludable. Pero el papel más importante lo juega regulando la producción de las glándulas secretoras del aceite del cuero cabelludo, factor muy importante en el proceso de crecimiento del pelo.
Puedes encontrarlo en: garbanzos, carne de res e hígado de ternera.
Proteína
El componente principal de tu cabello son las proteínas. Así que se te limitas a consumir lo justo para desarrollar tus músculos, no llegará del todo a tu cabeza. Incluso el déficit de proteínas está relacionado con las canas.
Por ello debes tomar proteínas naturales de alta calidad.
Puedes encontrarlo en: yogur, huevos, cacahuetes, lentejas, tofu, pollo y pavo.
Hierro
Este nutriente se encarga de llevar la sangre a todas las células de tu cuerpo. Si tienes algún tipo de anemia, tu cuerpo no podrá llevar el oxígeno necesario a tu cuero cabelludo y lo debilitará haciendo que crezca más fino y se caiga con más facilidad.
Puedes encontrarlo en: carne roja, verduras de hoja verde, pavo, huevo y almejas.
Magnesio
Este mineral es de los cuatro más abundantes en nuestro cuerpo y se encarga de más de 300 reacciones químicas en el mismo, incluida la que provoca el crecimiento del cabello. Un estudio llevado a cabo por la Universidad de Carolina del Sur descubrió que un 68% de los estadounidenses no consumían los niveles mínimos de magnesio, lo que provocaba dolores por inflamación, y la aparición de calvicie tanto en hombres como en mujeres.