Aunque el cerebro humano pesa poco más de un kilo, engulle alrededor del 20% del total de las calorías que consumimos diariamente. De ahí que mantener una dieta saludable y comer las cantidades adecuadas durante el día, sea esencial para mejorar nuestra memoria, agudizar nuestro intelecto y disfrutar de un excelente estado de ánimo.
Nuestra capacidad de concentración depende de que los mensajes que se envían entre sí las células cerebrales fluyan correctamente. Para comunicarse, éstas necesitan oxígeno y lo consiguen a partir de los niveles de azúcar en sangre que tengamos.
Entonces, ¿nos tenemos que hinchar a bollos para que el cerebro trabaje a pleno rendimiento? No. Toma nota de cuáles son los alimentos y cantidades que debes comer si quieres mejorar tu capacidad intelectual y empieza a incluirlos en tu dieta diaria.
1. Ácidos grasos omega-3. Las células cerebrales se envían los mensajes a través de un largo entramado de fibras nerviosas, y para que este cableado funcione correctamente el cerebro necesita una sustancia grasa llamada mielina. Así, tenemos que comer a menudo alimentos que nos ayuden a generarla y mantenerla en unos niveles óptimos, y los que contienen ácido omega-3 (como los pescados azules, el salmón, las nueces o las semillas de lino) son perfectos para que este complejo sistema funcione a la perfección.
2. Pasta. La serotonina es un neurotransmisor que nos ayuda a relajarnos y acabar con el estrés. Una ración de carbohidratos elevará los niveles de serotonina rápidamente despejando la mente de agobios y proporcionándonos un buen chute de energía.
Así damos vía libre al cerebro para que trabaje tranquilamente y a pleno rendimiento. Pero, ojo, porque los hidratos de carbono también hacen que el cuerpo libere insulina y nos sintamos algo somnolientos. Modera las cantidades para sacar el máximo beneficio a tu alimentación.
3. Huevos. Los expertos aseguran que los huevos podrían marcar una importante diferencia en el funcionamiento de nuestra memoria. Para la fabricación de la mencionada serotonina, el cerebro necesita triptófano, una sustancia que se encuentra principalmente en alimentos como los huevos y que mantiene los niveles adecuados de este neurotransmisor durante todo el día.
No sólo eso, también ayudan a incrementar los niveles de dopamina -otro neurotransmisor que juega un papel clave en nuestro estado de ánimo- asegurando una liberación de la misma lenta y constante sin altibajos que puedan variar radicalmente nuestras funciones motrices, emociones y sentimientos de placer.
La cantidad recomendada es de entre 3 y 5 a la semana, pero otros alimentos ricos en proteínas como la carne, los cereales o los frutos secos, tendrá un efecto similar. Además, si los incluyes en tu desayuno te sentirás saciado durante más horas, lo que se traduce en que picarás menos entre horas. ¡Imprescindibles en tu dieta!
4. Café. Nuestra capacidad de recordar cosas depende de que las células del cerebro puedan generar nuevas conexiones, y para eso tienen que estar espabiladas desde primera hora. La cafeína es un remedio clásico para la somnolencia y el cansancio mental.
Este efecto despertador lo consigue porque actúa directamente sobre determinados receptores de las células del cerebro bloqueando las sustancias que lo mantienen adormilado y activando los neurotransmisores.
Todo un chute de energía, pero cuidado, porque el exceso de cafeína nos pone de los nervios: la glándula pituitaria del cerebro interpreta este chorro de actividad como una advertencia de que hay una emergencia y empieza a producir adrenalina a lo loco.
Aunque estamos más activos y despejados y nuestro cerebro trabaja mucho más rápido, la ansiedad anula la capacidad de pensar con claridad y aturulla a nuestro cerebro.
5. Verduras crucíferas. El consumo de alimentos ricos en magnesio nos ayuda a mejorar nuestra memoria, y las verduras crucíferas como las espinacas, la coliflor o el brócoli, contienen interesantes cantidades de este mineral.
Según una investigación publicada en la revista Neuron, el aumento de los niveles magnesio en el cerebro podría ayudar a aprender y retener datos con mayor facilidad tanto a las personas jóvenes como a las ancianas.
“La mitad de la población de los países industrializados tiene un déficit de magnesio, pero mantener una dieta saludable podría retrasarse considerablemente los efectos del envejecimiento mental”, explicaba el profesor Guosong Liu, autor principal de la investigación.
6. Chocolate. Si necesitamos darle un impulso rápido a nuestro estado de ánimo y activar el cerebro para pensar de manera positiva, el chocolate es especialmente eficaz para el bombeo de dopamina.
Esto se debe a que contiene anandamida -una molécula de grasa que se asemeja a la sustancia activa de la marihuana- que nos conduce a un estado de placer y alegría libre de estreses, ideal para aclarar la mente.