El Sena ya no será sólo el entorno para que los enamorados, con el fondo de la torre Eiffel se declaren su amor, sino también un lugar donde ir a sudar la camiseta.

Al menos eso es lo que propone el arquitecto italiano Carlo Ratti con el proyecto que ha bautizado como “Paris Navigating Gym”, un diseño que conjuga originalidad, sostenibilidad y nuevas emociones dentro de los lugares de entrenamiento.

Y es que, si en el pasado las grandes naves que cruzaban el Mare Nostrum eran propulsadas por los remos de los esclavos, la propuesta del arquitecto es que en esta ocasión sean los deportistas, con la energía que generan en sus entrenamientos, los que se encarguen de mover el gimnasio y además, paguen por hacerlo.

Eso sí, mientras hacen flexiones o pedalean en sus bicis de spinning, disfrutarán de un panorama de excepción de la ciudad gracias a la gran cubierta acristalada con la que, tal y como se puede ver en los diseños, contará este particular lugar de entrenamiento.

 

Según explican desde el estudio de arquitectura, para llevar a cabo el proyecto se han inspirado en los “bateaux-mouches” (típicos barcos fluviales parisinos) para diseñar este vehículo abierto tanto a turistas como a los amantes de mantenerse en forma.

El barco, que contará con una capacidad máxima de 45 personas, tendrá una longitud de 20 metros donde cada bicicleta estática y cinta de correr estarán conectados a un convertidor que transformará la fuerza producida por el pedaleo y las zancadas en energía eléctrica, convirtiéndolo en un medio de transporte totalmente ecológico.

De hecho, los propios deportistas, a través de unas pantallas colocadas por todo el espacio, contarán con información tanto de las condiciones ambientales del río en cada momento así como de cuánta energía están produciendo para el movimiento de la barca.

“El ‘Paris Navigating Gym ‘investiga el potencial de la energía que pueden producir los deportistas, al mismo tiempo que ofrece una nueva experiencia urbana y prevé formas de integrar aún más el río en la infraestructura de movilidad de la ciudad”, aseguran desde el estudio.

Y porque no todo va a ser esfuerzo, por la noche, el gimnasio se transformará en un escenario único para la celebración de fiestas y eventos. Si te estás lanzando ya en lanzarte a comprar los billetes para disfrutar de esta nueva experiencia deportiva, no tanta prisa porque no será hasta mayo de 2018