Primero calentamos y movilizamos muñecas y hombros, antes de comenzar la rutina.

Puente de glúteos-caminar con los pies

Desde posición supina, con los pies apoyados en la pared manteniendo flexión de 90º, caminar con los pies hacia arriba, elevando caderas y glúteos. Trabajamos también los estabilizadores de la columna

Caminar con las manos desde posición de plancha

Desde posición de plancha (como si hicieses el pino), con pies apoyados en la pared, caminar con las manos hacia delante, y retornar a la posición inicial.

Mantener el abdomen activado y la espalda fuerte para estabilizar la espalda.

Saltos pies juntos lado a lado

Desde la posición anterior sin los pies demasiado altos, manteniendo hombros alejados de las orejas, realizaremos saltos a un lado y a otro, partiendo siempre desde la posición de pies juntos en la pared.

Escaladores y oblicuos

Desde la posición anterior, llevaremos de forma alterna primero, las rodillas al pecho, y una vez dominado el movimiento y correcta ejecución rotamos al lado contrario, implicando también a la musculatura de los oblicuos.

Flexiones de pecho contra la pared

Esta es la opción para quienes están empezando a realizar flexiones.

De pie contra la pared, apoyaremos las manos a una anchura un poco mayor que la de nuestros hombros, brazos extendidos, y realizaremos la flexión de brazos desde dicha posición

Con estos ejercicios trabajaremos la fuerza del tren superior, core y estabilizadores, así como glúteos e isquios. ¡Dadle duro!