No nos hemos privado de nada estas fiestas: turrones, mazapanes, el pavo, champán para acompañar el roscón… una maratón gastronómica que tiene consecuencias en forma de kilos de más. No queda más remedio que quitarse lo que sobra, y aunque sea imposible sacudírselos en solo tres días, estas 72 horas post fiestas navideñas son esenciales.

“Hay que comenzar cuanto antes, los primeros días son decisivos tras las comilonas, aunque lo ideal habría sido que durante las fiestas, sin dejar de disfrutar de las comilonas navideñas, hubiésemos controlado nuestra alimentación en los días anteriores y posteriores a esas copiosas comidas”, aconseja Alberto Sáez, Entrenador Personal de albertosaez.com

Una vez pasado ese periodo, la mejor forma para perder peso es haciendo ejercicio mientras procuramos reducir la ingesta de calorías, volver a la dieta pre-Navidad y mezclar los ejercicios de fuerza con los cardiovasculares.

Nuestro entrenador recomienda “sistemas de entrenamientos, muy de moda actualmente, como el HIIT o el TABATA, en los que se realizan circuitos de alta intensidad que mezclan estos ejercicios en un espacio de tiempo muy corto. Lo curioso de estos sistemas es que vas a seguir perdiendo calorías durante las 48 horas posteriores a realizar dichos ejercicios. Por lo que es una muy buena opción”.

Este tipo de sistemas activan el metabolismo, lo que nos hace perder calorías a la vez que definen nuestro cuerpo. La alta intensidad de las series realizadas combinadas con periodos de reposo queman grasas más rápidamente, incluso aquellas reservas complicadas de eliminar.

Tres series con repeticiones de diez giros de abdomen con dominadas, burpees, tres saltos y dos push-ups y abdominales en suspensión serían solo una de las opciones que podemos realizar para quitarnos cuantos antes esos kilos ganados.

Sin embargo, siempre debemos respetar los tiempos de ejercicio. La cantidad no puede sustituir a la calidad si hablamos de deporte, de nada sirve intensificar los ejercicios y “meterle caña” al cuerpo, pues aunque “mucha gente puede pensar que es la mejor opción, al final, el querer hacer más horas para perder esos kilos nos puede salir caro en forma de lesiones. Mi consejo es que después de tantos días de inactividad, el ejercicio sea paulatino, volviendo poco a poco a la rutina que manteníamos antes de la Navidad”, afirma Sáez.

Pero puestos a meternos de lleno otra vez en la rutina del gym, a la hora de querer acelerar los resultados debemos tener claro si debemos hacer los ejercicios cardiovasculares antes o después del entrenamiento, siendo lo más aconsejable según el experto “realizar el ejercicio cardiovascular después de trabajar la fuerza, porque al realizar este trabajo se necesita de mucha más técnica, energía y coordinación, al contrario que en el cardiovascular. No por hacer el ejercicio de cardio antes o después vas a perder más o menos peso”.

La solución a los desfases rastro-festivos es hacer ejercicio y deporte inmediatamente y de forma paulatina, ponerse cuanto antes en marcha, aunque, esto sí, nunca dejando de comer para compensar los kilos ganados. “Deberíamos hacer de forma estricta, en la medida de lo posible, 4 o 5 ingestas diarias, aproximadamente una cada 3 o 4 horas. Cada una de ellas no debe constar de grandes cantidades, pero sí deben ser ricas en verduras, frutas y proteínas”.

Dejar los turrones de lado y volver a a dieta mediterránea cuanto antes nos ayudará a subirnos a la cuesta de enero más ligeros de peso.