Pero ¿nunca te has preguntado el porqué de esa afluencia masiva de runners en los parques justo en otoño? Parece que tiene una o varias explicaciones.

1.- Cambio de temporada: septiembre es lo más parecido a enero que hay. Cambiamos de hábitos, de rutinas, nos ponemos metas para el nuevo curso, empiezan los coleccionables… En definitiva, es un nuevo comienzo tras las vacaciones en donde buscamos resetear, empezar de cero y hacer todo aquello que nos propusimos en enero y que no hemos cumplido nueve meses después.

2.- Recupera los excesos: nos pensamos que al igual que los árboles cambian de hoja nosotros vamos a poder cambiar nuestros hábitos y, por supuesto, que nos vamos a poder depurar de los excesos del chiringuito del verano.

Por eso comenzamos a darle duro al running, lo primero que pillamos, para intentar perder esos kilos de más, sin tener en cuenta que antes deberíamos habernos hecho una prueba de esfuerzo y sin que parezca importarnos demasiado las posibles lesiones derivadas.

3.- Es lo más barato: los últimos informes del sector de los gimnasios apuntan a que en 2015 los precios subieron más de un 10% en muchos casos. Lo low cost ya no es tan low, y por eso preferimos hacer algo que es barato y que puede hacerse con poco equipamiento.

A no ser que te vuelvas un pijo del running y te gastes una pasta en zapatillas, camisetas térmicas, forros, y demás gadgets para monitorizarte, lo suyo es que con poco presupuesto ya estés listo para salir a correr.

4.- El tiempo acompaña: ya no hace el calor sofocante del verano y, aunque las horas de luz van en disminución, aún se pueden aprovechar bien los días. Hasta que cambien la hora y sea de noche a las seis de la tarde. Pero, por lo general, las temperaturas suaves de los primeros compases del otoño animan a salir a correr.

5.- Buscas estar a la moda: en el trabajo o en la universidad todo el mundo habla de que va a correr la San Silvestre o cualquier otra carrera popular y tú, para no quedarte fuera del círculo, no tienes más remedio que calzarte las zapatillas y ponerte a entrenar para llegar a alguna de esas citas y no quedarte fuera del grupo.