Ese momento en el que llegas a la barra del bar a las cinco de la mañana y gritas: “¡Chupitos para todos!”. Estás en la cresta de la ola y lo peor es que ya llevas en el cuerpo más copas que veces ha sonado la canción de Despacito. De ahí que creas que al pedir alcohol en pequeñas dosis, las secuelas serán menores.

Pero dejando a un lado la horrible resaca que vas a tener mañana y las polillas que van a salir de tu cartera, vayamos a lo que realmente nos importa. ¿Cuánto has engordado tras una noche de fiesta loca? (Porque déjame decirte que si no es loca no ha merecido la pena)

¡Ajá! ¿En serio te pasas de lunes a jueves en el gimnasio cuidando ese sixpack y controlando tu alimentación para luego tirarlo todo por la borda cual bucanero que vacía al mar su sexta botella de ron? No te estoy diciendo que no salgas de fiesta (líbreme el señor de sugerir algo así), pero quizás te convendría saber cuántas calorías tiene el alcohol que ingieres. Os lo comento porque hace no mucho, una chica que estaba a dieta me dijo: “Desde que me cuido, cuando salgo solo bebo chupitos. Al ser menos cantidad, engorda menos”. ¿Seguro?

Maravillada ante tal confesión decidí investigar un poco. Y alucinada me quedé con los resultados. Según la Organización Mundial de la Salud, cada gramo de alcohol ingerido corresponde a siete calorías. Así, sin discriminar entre chupito y cubata. Sin embargo, quizá mi amiga la ‘chupitera’ tenía razón. A menos cantidad (gramos), menos calorías. ¿O no?

Tequila
Tequila | Wikipedia

Pues no, queridos amigos. Porque en el mundo etílico la cantidad no importa, lo importante es la graduación. Es más, si quieres conocer exactamente las calorías que tiene ese cóctel o chupito que acabas de pedirte, ve sacando la calculadora y multiplica por ocho los grados de la bebida alcohólica que hayas elegido. Después, multiplica ese resultado por la cantidad que consumas y sabrás exactamente cuántas calorías van a instalarse en tu cuerpo.

Dime qué bebes y te diré lo que engordas

Tranquilo, no voy a hacer que te pongas en plan calculadora humana como en Saber y Ganar. He aquí algunas referencias del contenido calórico de las principales bebidas alcohólicas que consumimos los españoles según la Guía de referencia básica para abordar el abuso del alcohol de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria:

Caña de cerveza (200 cc): 70 kcal.

Vaso de vino (100 cc): 70 kcal.

Ron (100 ml): 207 kcal.

Ginebra (100 ml): 212,8 kcal.

Vodka (100 ml): 224 kcal.

Whisky (100 ml): 224 kcal.

Tequila (100 ml): 235,2 kcal.

La peligrosa importancia del acompañamiento

De acuerdo, pero quizá no te hayas dado cuenta de un pequeño detalle. Estas calorías se refieren solo al alcohol en sí. A la bebida alcohólica, vaya. Entonces, ¿qué pasaría si a esos 100 ml de whisky le añadiésemos un refresco gaseoso? Pues que instantáneamente le estaríamos sumando, aproximadamente, 100 calorías. Sé lo que estás pensando. Que esto significa que los chupitos, al ser alcohol a palo seco (hablando claramente), engordan menos. Error de nuevo. Podría parecerlo, pero no. Y el motivo vuelve a ser que depende de la bebida alcohólica que elijas para esa ronda de chupitos.

Te lo voy a mostrar con un ejemplo. Mientras que un cubata de ron con un refresco gaseoso sumaría la cantidad, aproximada, de 307 calorías, un solo chupito de absenta contendría 392.

¿Chupitos o copas?

Como habrás podido comprobar, las diferencias entre estas dos caras de la misma moneda tampoco son tan abismales. Ten en cuenta que las calorías del alcohol son muy perjudiciales para tu organismo. Denominadas como calorías ‘vacías’, este término hace referencia a que son calorías que nuestro cuerpo no utiliza para el esfuerzo físico ni para el mantenimiento de la temperatura corporal. Vaya, que biológicamente, los seres humanos podemos vivir perfectamente sin probar ni una sola gota de él.

Además, ojito con los combinados que mezclan varios alcoholes y con los cócteles de origen tropical que, aunque contiene menos alcohol, son una auténtica fiesta del azúcar.

Un truco si quieres engordar menos

Lo sé, tú quieres un buen pelotazo, pero si quieres mantener la línea estas dos alternativas pueden ayudarte. Si te decantas por una copa, olvídate de los refrescos gaseosos. Combínala con un refresco light o zero o con un zumo de frutos natural.